Uno de los mayores riesgos de ejercer la medicina es ser demandado por un paciente que alegue haber sufrido un daño a causa de un error médico. Además, cualquier profesional de la salud está expuesto a este tipo de riesgos.
Por esa razón, un seguro de responsabilidad civil profesional es esencial para ti, si deseas solventar problemáticas donde te veas perjudicado.
¿Cómo puede un seguro de Responsabilidad Civil Profesional proteger tu reputación profesional ante reclamaciones?
Si eres demandado(a) por un paciente que haya sufrido daño mediante una práctica médica, el seguro se encarga de cubrir los gastos asociados a problemáticas que involucran tu profesión directamente. Por lo tanto, las reclamaciones más comunes son:
- Sí presenta un diagnóstico erróneo y éste conduce a un tratamiento inadecuado.
- Si se produce una reacción adversa o se administra un medicamento equivocado.
- Si realiza un procedimiento médico sin el consentimiento de un paciente.
- No utilizar los instrumentos quirúrgicos adecuados.
- Violación de confidencialidad.
Las consecuencias financieras causadas por un error involuntario en la práctica médica pueden involucrar asesoría legal. Al contratar este tipo de seguro, los profesionales de la salud cuentan con un respaldo que posee una amplia variedad de soluciones para cubrir los honorarios de abogados y otros gastos legales vinculados a la defensa en caso de una demanda.
¿Qué sucede si un equipo médico se daña durante su uso y causa lesiones al paciente?
Entre las coberturas opcionales, el seguro te protege financieramente si tu paciente sufre daños por consecuencias del uso de equipos médicos como:
- Radiografía.
- Tomografía.
- Radiación.
- Laser.
- Medicina nuclear.
En este aspecto, si tu paciente es lesionado debido a una falla mecánica de los equipos médicos, la cobertura se encarga de costear los gastos pertenecientes a reclamaciones, demandas legales, entre otros.
Por último, el seguro de responsabilidad civil profesional te ayuda a solucionar estas problemáticas vinculadas por daños y/o lesiones de pacientes que hayan sido perjudicados durante una intervención médica. Al adquirir este tipo de respaldo, como profesional, está protegida tu reputación y además establece tu tranquilidad.